Claves para lograr que la vuelta al trabajo no suponga abandonar la lactancia

Qué hacer para seguir alimentando al bebé con leche materna y cumplir con la recomendación de la Organización Mundial de la Salud: “la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses, la introducción de alimentos apropiados para la edad y seguros a partir de entonces, y el mantenimiento de la lactancia materna hasta los 2 años o más para lograr un crecimiento, un desarrollo y una salud óptimos”. La vuelta al trabajo es la principal causa de abandono prematuro de la lactancia materna.

QUÉ TIPO DE SACALECHES SE ADAPTA MEJOR A MIS NECESIDADES

Según las conclusiones obtenidas en las investigaciones promovidas por Medela y desarrolladas por la doctora Jacqueline Kent en la Universidad Western Australia (Perth, Australia), la cantidad de leche materna ‘normal’ que ingiere un bebé alimentado exclusivamente con leche materna entre uno y seis meses oscila entre 54 mililitros y 234 mililitros por toma y entre 478 mililitros y 1.356 mililitros al día, si bien hay que tener en cuenta que la producción de leche está directamente relacionada con la cantidad que se extrae del pecho.

Tomando como modelo una madre que se reincorpora al trabajo en septiembre tras la baja de maternidad, que desea que su bebé siga alimentándose de leche materna mientras está en la guardería y que aplica un modelo de lactancia compartida con su pareja cuando regresa a casa, la mejor opción es optar por un sacaleches doble.  Los beneficios que se obtienen con esta opción son varios:

Sesiones más cortas y eficaces:

-Un extractor doble permite obtener hasta un 18% más de leche en una sesión si se compara con la extracción simple.

– La extracción es mucho más rápida con un extractor doble que con uno simple: la velocidad es dos veces superior y el 80% del volumen de leche se puede retirar en los primeros seis minutos.

-La calidad nutricional de la leche obtenida con un extractor doble es mucho mayor: tiene un mayor contenido en grasa y proporciona al bebé un valor energético más elevado.

-Un contenido energético alto señala un mayor drenaje de los pechos, lo que ayuda a mantener la lactancia.

-Eyección de la leche más temprana y más leche extraída.

-Con la extracción doble aumenta los niveles de prolactina, lo que ayuda a aumentar la producción de leche.

-En definitiva, optar por la extracción doble otorga a las madres más tiempo para ellas (una media de dos horas diarias) y más calidad en la leche materna para su bebé.

CONSEJOS PRÁCTICOS PARA EXTRAER LECHE: UN PROCESO INDOLORO

“Habituarse a la extracción de leche es algo progresivo, si bien, en cualquier caso, es un proceso indoloro. Si la madre siente algún dolor, debe interrumpir inmediatamente la extracción y pedir consejo a su puericultora”. Algunos consejos prácticos para facilitar la iniciación en este proceso:

-Un factor fundamental es la higiene.

-Tanto si la madre utiliza un sacaleches como si se extrae la leche a mano, hay que lavarse meticulosamente las manos con agua y jabón antes de realizar la extracción. Una carga bacteriana reducida en el momento de la extracción está asociada a un bajo índice de proliferación bacteriana durante la conservación.

-En el caso del pecho, es suficiente el lavado con agua (prácticas habituales de higiene de la mama) para la reducción de bacterias.

-Extraer leche es mucho más fácil si estás relajada. Recordar y poner en práctica los ejercicios de relajación que la madre aprendió en las clases de preparación al parto es de gran ayuda. La respiración profunda puede contribuir a calmarnos.

– Además, un lugar privado y evitar distracciones también es de utilidad para relajarse.

-Si la extracción se realiza durante el horario laboral, la mayoría de las empresas deben ofrecer un lugar razonablemente adecuado para que las madres lactantes puedan extraer leche, bien un lactario, bien alguna sala o zona privada que se pueda utilizar. Lo normal es que la madre no tenga que meterse en el baño para extraer leche.

-Hay varios trucos que la madre puede poner en práctica para estimular el reflejo de eyección de la leche: masajearse los pechos antes y durante el proceso de extracción, aplicar compresas tibias en el pecho para estimular la salida y el flujo de leche y, si fuera posible, ambos.

Claves:

-La mejor posición para extraer leche es: hombros relajados y espalda y brazos bien apoyados.

Cómo hacerlo: sujeta la copa o embudo del sacaleches con el pulgar y el dedo índice. Con la palma de la mano y los otros dedos, sujeta el pecho. Con estas indicaciones, el embudo (la parte del extractor con forma cónica) se mantiene pegado al pecho y no es necesario presionar sus bordes contra el tejido del pecho. Si los presionas, podrías bloquear los conductos galactóforos (por donde baja la leche).

-Además, es importante seleccionar el tamaño de embudo correcto para cada pezón. Como orientación, el túnel de embudo debe rodear el pezón, pero dejar el suficiente espacio para que no roce contra la pared del embudo y pueda moverse libremente hacia delante y hacia atrás.

-Por último, es recomendable tomar agua antes y durante la sesión de extracción.

 

Solo el bebé sabe cuándo tiene hambre

La leche materna siempre alimenta, pero hay que asegurarse que el recién nacido realice entre diez a doce tomas efectivas al día de 20 minutos

Los alimentos aportan una cantidad de nutrientes y una densidad energética. Cada comida y cada plato es nutricionalmente diferente. Con la leche materna pasa lo mismo, el bebé ingiere un volumen de leche y una cantidad de nutrientes diferente en cada toma. Ni siquiera los adultos comemos la misma cantidad en el desayuno que en la comida, ni el primer plato es igual al postre.

Por eso es fácil deducir que el bebé toma dependiendo de dos factores: de su capacidad gástrica y de la cantidad de grasa que ingiere. Esto le hará sentir más o menos saciado y tardara más o menor en volver a demandar.

Dado que el estómago de un recién nacido es tan pequeño como una cereza, pronto se llena, incluso algunos se duermen al pecho antes de llegar a llenarlo, lo que les impide hacer una buena toma. Por consiguiente, ingieren más leche de inicio que es menos rica en grasa, y es normal que al poco tiempo demanden una nueva toma.

Es decir, él sólo sabe cuándo y cuánto debe comer. Aconsejar a una madre dar diez minutos de cada pecho y no antes de las tres horas, puede resultar insuficiente.

Según su necesidad el bebé modificará la frecuencia y la duración de la toma. Las necesidades de alimentarse más o menos a menudo son individuales. En los adultos lo tenemos claro, nadie retira el plato a un invitado si a los diez minutos no se lo ha terminado, pero tampoco es normal tener un invitado una hora comiendo el mismo plato (en todo este tiempo, se puede haber comido la olla entera).

Pues en los bebés igual, pueden tener la teta en la boca y no mamar. Hay que saber distinguir si el bebé tiene la teta en la boca a modo de chupete o está mamando, hay que valorar las tomas, sobre todo los primeros días, porque si el bebé no come no ganará peso, o, en el peor de los casos perderá peso, y el problema está servido. Tendrá que oír a las «doctas» voces decirle: «Tu leche no lo alimenta».

¡Qué no lo alimenta!, claro que lo alimentaría si tomara, el problema es que no toma, y si no mama no puede ganar peso, la cuestión no es la leche.

El asunto está en conseguir que el bebé mame, es importante, que los primeros días haga como mínimo unas diez o doce tomas de succión efectivas, es decir, que no se duerma al pecho, que este como mínimo de 20 a 30 minutos mamando.

Por eso, si se duerme hay que despertarlo, es decir la lactancia es a demanda, pero los primeros días, ¡cuidado! con la demanda, que muchos bebés no piden porque priorizan el dormir al mamar, y el dormir no engorda.

El inicio de la lactancia tiene que tener una valoración continua y un apoyo constante por parte de profesionales cualificados en esta materia que aseguren el éxito de la misma y eviten abandonos innecesarios y no deseados.

Es necesario promover los talleres de lactancia materna con el fin de ofrecer apoyo a las madres para resolver dudas y solventar problemas de lactancia. Estos foros son una alternativa a la pérdida de la cultura de la lactancia materna, producida como consecuencia de la falsa creencia de que la leche artificial es casi igual o mejor a la materna.

 

Semana Mundial de la Crianza en Brazos

A diferencia de lo que se creía antes, el portear a los niños en brazos es bastante estimulante y otorga grandes beneficios para el desarrollo de su percepción del exterior.
Algunos de los beneficios:
• Enriquece el desarrollo neurobiológico: Al cargar en brazos a nuestros bebés todos sus sentidos se activan y se estimulan.
• Potencia la confianza en sí mismo: Se sienten acompañados, otorgando un vínculo de apego que ayudará a enfrentar y superar de mejor manera los desafíos que se presenten más adelante.
• Fortalece una base emocional segura: Cada vínculo que se genera en esta etapa tendrá una implicancia en los sentimientos de seguridad, autoestima y posteriores relaciones sociales.
“Estamos en  la semana mundial de la crianza en brazos.”
Cerquita, pegados piel a piel, abrazados y contenidos. Los bebés en brazos no se «malcrian».  Los brazos son una NECESIDAD de los seres humanos ( por algo nacemos sin saber caminar)